Premios Gubia de Bronce 2020

El taller Hermanos Caballero Farfán ha sido galardonado con el Premio Gubia de Bronce 2020 que anualmente concede Grupo Abades, a través del restaurante Abades Triana y la empresa Tour Cofrade.

En esta séptima edición, el premio Gubia ha querido reconocer el extraordinario trabajo que este taller de carpintería y dorado viene realizando para numerosas hermandades de Sevilla y Andalucía en general. El reconocimiento fue entregado en una gala celebrada esta noche en Abades Triana.

El acto fue abierto por el director de Abades Triana, Francisco Azuaga que en su intervención destacó que “la entrega anual de este premio se ha convertido en una cita imprescindible de la Cuaresma de Sevilla. Abades se muestra especialmente sensible con las tradiciones de Andalucía en general y de Sevilla en particular”.

Jesús Méndez, director de Tour-cofrade hizo una breve semblanza de cómo se ve la Semana Santa desde el mundo del turismo y agradeció a las instituciones y empresas la colaboración con este proyecto que ya está plenamente consolidado.

Hermanos Caballero Farfán

El Taller de Talla, Carpintería y Dorado “Hermanos Caballero Farfán, S.L” pertenece a dos hermanos: Manuel y Federico Caballero González.

Sus comienzos en la profesión tuvieron lugar a muy temprana edad, en el Taller de Carpintería Religiosa que regentaba su padre, Don Manuel Caballero Farfán, sucesor de Don Manuel Caballero Sousa, también tallista y carpintero artesano, quién trabajó durante años con el que fuera su suegro, Don Francisco Farfán Ramos, autor del paso de la Hermandad del Santísimo Cristo del Calvario y del antiguo paso de la Hermandad del Museo, entre otras obras realizadas para la ciudad de Sevilla. De su taller de bordados salieron magníficas obras, tales como el techo de palio de Nuestra Señora de la Victoria de la Hermandad de Las Cigarreras, los faldones para el paso del Santísimo Cristo del Calvario y un manto de camarín para María Santísima de la Amargura, entre otras obras. Obras de reconocida valía por las que adquirió fama y prestigio en la Sevilla de finales del siglo XIX y principios del XX.

Los Hermanos Caballero Farfán y sus hijos, por consiguiente, representan la cuarta y quinta generación de una dinastía de artesanos que, a golpe de formón, gubia y dorado, han elaborado durante años auténticas obras de arte que hoy podemos contemplar, tanto en sus sedes eclesiásticas, como en sus solemnes estaciones de penitencia.

En 1990, los Hermanos Caballero Farfán inauguran su Taller en la sevillana Plaza del Pelícano, formando así un verdadero equipo artesanal, aglutinando conocimientos que darían como resultado la consecución de una gran diversidad de obras.

En el verano del 2000, trasladaron su domicilio social al Polígono Industrial San Jerónimo de esta capital, donde actualmente continúan.

Imágenes cedidas por ArteSacro.